El pasado 5 de octubre tuvo lugar la segunda sesión de la Mesa de PAS que habíamos solicitado el 70% de la representación sindical, con la finalidad de tratar la puesta en marcha de un protocolo organizativo para el PAS que atienda a las necesidades de Protección y Conciliación generadas por la pandemia Covid.
En la primera sesión expusimos nuestro Plan de Protección, que no mereció el interés de la Gerencia, de forma que las medidas de Prevención que contienen las plantearemos, caso a caso, en aplicación estricta de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Nuestra Salud y nuestra seguridad es lo primero. (VER)
A continuación propusimos nuestra propuesta de Teletrabajo, que pasa necesariamente por establecer un catálogo de puestos teletrabajables con criterios objetivos previamente definidos y por la asunción, por parte de la UZ, del coste de los equipos informáticos que se utilicen, así como de otras consideraciones. Nos hemos emplazado, en un plazo breve, a detallar una nueva regulación y a poner en marcha la Comisión de Seguimiento que analice los casos en los que haya discrepancias entre la persona solicitante y el responsable de la Unidad. (VER)
En la segunda sesión expusimos el Plan la UZ Me Cuida, al cual la Gerencia se ha comprometido a responder por escrito la próxima semana. (VER)
Teniendo en cuenta que el 24 de noviembre se celebrará la elección del Rector, queremos compartir una reflexión con los cuatro candidatos y candidatas (Ana Isabel Elduque, Carmen Marcuello, José Antonio Mayoral y Jesús Santamaría) que han anunciado su intención de concurrir en este proceso.
Llevamos 6 meses bajo la “contingencia Covid” y nada hace prever se solucione en los próximos 6, 12 ó 18 meses, lo cual pone de manifiesto la necesidad de adaptar nuestro sistema organizativo a esta situación.
Si no integramos en nuestro funcionamiento ordinario los cambios organizativos necesarios estaremos expuestos a los vaivenes de la pandemia y necesitaremos dedicar todos nuestros esfuerzos a responder a las contingencias que se vayan produciendo. Si no somos capaces de adelantarnos a las contingencias, este sobreesfuerzo nos estancará y perderemos la oportunidad de mejorar nuestro sistema de trabajo y desarrollar nuestra carrera profesional sobre las bases de la eficiencia y un trato justo.
La Gerencia debe alcanzar un Acuerdo con los representantes del PAS que establezca ese Protocolo de Protección y de Conciliación, pues de lo contrario serán los Planes de Contingencia de los Centros quienes lo hagan: sin contar con la participación del PAS, dejando a la mitad de la plantilla (Servicios Centrales) fuera de su ámbito de aplicación y generando un trato distinto entre los trabajadores de una única plantilla.
Necesitamos disponer de mayor protección frente a la pandemia, estableciendo “grupos burbuja” donde se pueda, impulsando el teletrabajo como medida de protección y adaptando el puesto a las personas especialmente sensibles.
Necesitamos medidas de conciliación, que sólo podrán ser efectivas si vienen acompañadas de un reforzamiento de la plantilla con contrataciones temporales en aquellas unidades que lo necesiten.
Que el Consejo de Dirección se encuentre en funciones no ayuda, pues el Rectorado tiene que gestionar el enorme problema generado por la Covid en una posición de debilidad que supone haber agotado su mandato y estar pensado en formar nuevos equipos. Sin embargo, esto no puede suponer el “olvido del PAS”. Nuestro posicionamiento es firme, pues consideramos que expresa el sentir mayoritario de la plantilla del PAS, así se lo hemos expresado a la Gerencia.
Además, el cómo afrontemos esta crisis puede suponer una oportunidad de mejora y de superar los retos que supone una Universidad del siglo XXI: teletrabajo, flexibilidad, conciliación.. O seguir anclados en el siglo XVI, viendo al colectivo PAS, de nuevo cómo un problema en lugar de cómo parte de la solución